La muerte es un páramo
Escrito por: Tania Martínez Suárez
I
Estiré el cuello para ver qué pasaba
Un día normal, en un trayecto normal
Una pausa en tránsito nos puso alertas
Al llegar a la esquina vimos un par de patrullas
Una camioneta blanca que anuncia la muerte
S.E.M.E.F.O.
Estire el cuello para ver qué pasaba
Y lo ví ahí tendido
Con un par de zapatos nuevos,
Pantalón gris
Gorra a juego
Camisa azul
La cara rígida
Un gesto propio de quien ha sido tomado por sorpresa.
En las manos todavía un par de codos y tubos recién comprados en la Tlapalería
un cuerpo tirado en el piso
Como una pausa impuesta
Como si en cualquier momento su marcha pudiera reanudarse
II
La vida persigue el tiempo
O el tiempo persigue la vida
El trajín no se detiene
Está visto que los individuos pueden caer muertos en el asfalto
En el campo
En las cañadas
En las trincheras, cualesquiera que fueran
En las bahías
En las avenidas
En los caminos reales
En las bibliotecas
En el trolebús
A unos metros de su casa
Y la vida no detiene su andanza
III
¿Él lo habría sabido?
Al despertar ese día de alguna manera supo que ese día moriría…
De todos modos decidió salir de casa
Ir a trabajar como buen fontanero
Caminar
Acudir a comprar los materiales
¿Tratando de ganarle una partida al destino?