Descripción

En 2020, el mundo vivió una serie de sucesos de tremendas proporciones y consecuencias, con la declaración del estado de pandemia por parte de la OMS, los confinamientos y las medidas impuestas para, teóricamente, proteger a la población frente al fenómeno covid-19. Años después, el debate sobre lo que ocurrió continúa vigente. En pleno clímax de los acontecimientos, Thomas Cowan y Sally Fallon Morell redactaron este valiente libro que no solo pone en evidencia la falta de base científica de la narrativa oficial, sino que tira del hilo para rastrear el origen y los fundamentos de la noción de los virus como causantes de enfermedades.Pero si no son los virus, entonces ¿qué es lo que nos hace enfermar? Para poder comprender la naturaleza de las enfermedades es preciso abordar antes la naturaleza de la salud, y es en este sentido donde encontramos las que quizá sean las contribuciones más importantes de este libro, ya que nos acerca con un lenguaje divulgativo y sencillo a conceptos complejos, pioneros y de una trascendencia fundamental tales como el agua estructurada, la resonancia, la función de los exosomas o la dimensión electromagnética de la vida orgánica.Los autores cubren también un repaso histórico de epidemias pasadas (peste, viruela, gripe española, poliomielitis, sida, etc.) y sus causas hasta llegar a la actualidad, rescatando documentación y estudios relevantes que ponen el punto de mira en diversos factores como el estilo y condiciones de vida, el impacto de la tecnología industrial en la alimentación, la contaminación ambiental, el empleo masivo de productos tóxicos, el rol de los insectos y parásitos, las radiaciones electromagnéticas e incluso aspectos de naturaleza anímica y mental. En relación con todos estos ámbitos nos aportan claves y recursos para fortalecer nuestra salud, pero sobre todo nos invitan a una reflexión profunda sobre nuestra visión del ser humano y la naturaleza, para rescatar una antigua comprensión que la sociedad moderna ha perdido y que, sin duda, necesitamos para no repetir una situación como la vivida recientemente e incluso para nuestra propia supervivencia como especie.